HISTORIA DEL MUNDO CONTEMPORÁNEO

Charlot le escribe una carta a Maggie

Hola Maggie, te echo mucho de menos.

Estoy cansado de estar aquí, en el taller o la industria del metal, como dicen nuestros jefes los burgueses. No nos tratan nada bien, no me siento cómodo, trabajar tanto me deja exhausto, sin energía. Mi capataz me tiene trabajando muchísimas horas, no se rige por el sistema del taylorismo y los del sindicato obrero no hacen nada. Solo promesas de que esperemos al maquinismo, el cual nos facilitará el trabajo, que esta situación acabará muy pronto. Pero yo no los creo, al final todo acabará en una manifestación o peor aún, una huelga prohibida.

Cuando éramos jóvenes sólo pensábamos en el éxodo rural, en los automóviles, ciudades, en viajar a Inglaterra, en lo felices que íbamos a ser y en el dinero que íbamos a ganar. Nuestro sueño, ser empresarios. Recuerdas Maggie?

La semana pasada nos quedamos sin electricidad ocho horas, la productividad bajó muchísimo y todo fue un caos absoluto. Tuvo que venir la policía porque los obreros y los jornaleros se negaban a trabajar en esas situaciones y se armó una buena. Este sistema capitalista va a acabar con el mundo.

No nos tienen en cuenta.

Mi compañero Juan que está metido en un partido socialista nos dijo que se acerca una revolución agrícola y que afectará a todo los sectores industriales, incluso al petróleo.

Pero yo creo que todo eso me supera, soy un anarquista que sólo piensa en volver a casa.

¿Tú qué tal en el campo?

¿Cómo fue la operación de tu madre? La verdad he estado muy preocupado porque no he sabido nada, tú sabes que tu madre para mi es como si fuera la mía. Cuánto daría por estar ahí contigo mi amor.

¿Y Agustín? ¿Se sacó por fin, después de tantas prácticas el carné de conducir? Al final lo veo de capitán en una navegación a vapor, este chico no sienta la cabeza.

¿Y Marta? ¿Empezó bien la primaria? Espero que se acuerde de mi, es tan pequeña, pero recuerdo que se parecía tanto a ti…Ay, como te extraño

La verdad es que aquí no tengo mucho tiempo libre, si quiera para pensar en mis cosas… Es un trabajo realmente agotador.

Nos tienen todo el día trabajando, sin parar. Incluso trajeron un nuevo invento, una máquina que nos dé de comer, para que no paremos ni un segundo de trabajar. Esto ya me parece una locura.

Probaron esa máquina conmigo, la cual finalmente no funcionó, terminó rompiéndose, pero no lo hizo sin antes abofetearme con todos sus aparatos y dejarme en ridículo delante del resto de trabajadores.

El único segundo que puedo tomarme de descanso es yendo al baño, pero ya ni eso. El jefe ha puesto cámaras en todos lados, y cada vez que entro al servicio puede ver todo lo que hago. El otro día me echó la bronca porque aproveché ese rato para poder descansar un poco.

Me duelen mucho los brazos de apretar tuercas diariamente, sin parar.

Aunque tampoco quiero que te preocupes mucho por mi. Al fin y al cabo, estoy trabajando y no me puedo quejar de ello, seguiré así para conseguir dinero, para comprarte todo lo que quieras, para darte todo lo que necesites, porque tú eres mi vida.

Extraño abrazarte, extraño tu olor, ese perfume tan dulce que utilizabas, tu cabello rizado, tus labios rosados…Ojalá se pudieran hacer visitas aquí.

Algún día conseguiré un trabajo mejor, o un rango superior al mío, o mejor, seré el jefe de esta fábrica. Yo haría las cosas mucho mejor y jamás trataría así a mis empleados. Sé que, si lucho por ello, con mucho esfuerzo algún día lo conseguiré.

Lo haré por ti, por mi, por nosotros, por nuestra familia…

Por cierto, hablando de familia. ¿Los niños han ido a visitar a sus abuelos?, ¿ y a sus tíos?¿ Y tú? ¿Has ido a visitar a mis padres?, ¿y a mis hermanos? Yo llevo mucho tiempo sin saber nada de ellos. De verdad, si hablas con tus suegros o cuñados, háblales de mi, dile que les echo mucho de menos, a todos, que tengo ganas de verlos pronto y que no se preocupen por mi, que yo estoy bien.

Te escribo esto en el baño, espero que el jefe no me pille, porque si no, se enfadará mucho y me hará trabajar el doble.

Me encantaría que me respondieras esta carta Maggie, con tu característica y preciosa letra.

Te necesito tanto, aquí todo es tan triste, tan gris. Y tú siempre destacabas por tu luz, por tu forma de ser, tan maravillosa y agradable con todas las personas. De verdad, que afortunado soy de tener a una mujer así. Jamás te cambiaría por nada ni por nadie, nos vemos pronto mi amor.

Con cariño de: Charlot